La vamos a ir introduciendo para
que los niños se familiaricen con ella,
se acostumbren a escuchar otro idioma, para que tomen una actitud positiva
hacia una lengua nueva y tengan la curiosidad por aprender y escuchar.
El
enfoque metodológico que le damos va orientado es facilitar la comunicación con
los demás, procurando que se den al mismo tiempo la comprensión y expresión
verbal. Para ello vamos a utilizar
diferentes recursos didácticos y metodológicos como son películas, juegos,
vídeos…
El
material de la Editorial Algaida que utilizamos durante todo el curso lleva
unas propuestas de vocabulario en inglés en todas las unidades didácticas. Va
también acompañado de la repetición y el apoyo visual y auditivo para afianzar
los aprendizajes. Todas las actividades que proponemos llevan un componente
lúdico para que los niños aprendan jugando el idioma.
No
tenemos que olvidar que los niños, salvo que los padres sean bilingües, están
aprendiendo a hablar en su propio idioma, todavía no saben pronunciar algunos
de los fonemas del castellano y eso se va consiguiendo según su madurez
fonológica. Hoy en día se habla de bilingüismo sin saber claramente lo que ello
significa. Una persona, un colegio son bilingües si todas las personas que allí
se comunican saben los dos idiomas y son capaces de expresarse y entenderse en
cualquiera de los dos idiomas. Si esto no es así no se debería llamar bilingüe.
Los
contenidos que vamos a ir desarrollando son los que siguen: saludos de entrada
y despedida, colores, números, elementos del cuerpo, normas de cortesía para
solicitar y agradecer, animales, alimentos básicos, acciones que conlleven
rutinas (comer, beber, lavarse, levantarse, abrir, cerrar, dormir…)